"El código locriano prohibía a cualquier mujer griega libre ir acompañada de más de una criada, eso sí, salvo en el caso de que la mujer esté borracha"
lunes, 30 de agosto de 2010
Excepciones
domingo, 29 de agosto de 2010
miércoles, 18 de agosto de 2010
Kalaallit Nunaat...
...o como lo llamamos nosotros, Groenlandia, en kalallisut, el idioma local esquimal o 'inuit', se llama Kalaallit Nunaat.
No es una isla, sólo es una costa, el país es como cuatro veces España de grande, pero el 80% de la superficie es agua, o mejor dicho hielo, y en esa costa sólo viven 80.000 habitantes, la capital tiene 16.000 habitantes. Cuando hablé con un guía local entendí sesenta mil (sixty thousand), pero me acabo de dar cuenta consultando la wikipedia de que lo que me dijo fue sixteen.
El verde de la costa engaña con lo que hay detrás de sus montañas. Tuve la suerte de poder verlo primero desde un helicóptero y más tarde escalando un poco. Se podía ver una inmensa sábana blanca, como una enorme presa esperando a romper por el poco hueco que había entre montañas, aunque evidentemente todo ese hielo avanza demasiado lentamente, lo que forma en lugar de ríos de agua, acantilados de hielo que se van desquebrajando una vez llegan al mar.
En Groenlandia no hay árboles, así que si te persigue un oso polar lo tienes crudo para esconderte, esto es debido a que a 1 metro del suelo está congelado en lo que se conoce como el permafrost. Por lo que allí lo único crece son pequeños arbustos y musgos. Me pareció muy curioso uno en concreto que daba como fruto unas pequeñas bayas rojas comestibles que más tarde nos dieron a probar algunos lugareños, estaba toda la montaña llena, y eran fáciles de coger. A excepción de algunos salientes de roca viva casi toda la costa estaba cubierta de vegetación. Además, debido al permafrost y la roca viva en las poblaciones no pueden enterrar las cañerías lo que les obliga a tenerlas sobre la superficie.
Los groenlandeses son, en su aspecto, de tres tipos, o inuits (aspecto asiático-mongol), o daneses (rubios-arios) o una mezcla de ambos muy curiosa, pelo rubio ceniza, ojos azules y rasgados. Son muy amables y tímidos, son un poco guarros, las calles están llenas de chatarra, pero las casas son muy monas todas de colores. Son aficionados al fútbol, suelen ser del Manchester o del Barça. Son independentistas en su mayoría, buscando tener un país propio en lugar de depender de Dinamarca, pero tampoco es algo que les obsesione, poco a poco van consiguiendo progresos en este sentido. Y por lo que vi, son bastante aficionados a la bebida.
En lugar de lo que se piensa, la televisión, que supongo es de lo poco que pueden hacer en invierno con 18 horas de noche y -30ºC, es muy influyente en la gente joven y se pueden ver grupillos de raperos, chavales con cresta o incluso una gótica esquimal, una mezcla rara.
Volviendo a lo que son los paisajes como podéis imaginar son bastante impresionantes, todas esas grandes montañas verdes bañadas con la bruma y el mar lleno de icebergs. Hay bastante vida animal, casi toda "acuática", focas, ballenas, delfines... algunas aves grandes y muchos perros huskies siberianos o perros esquimales que los locales usan para tirar de los trineos. Los insectos son enormes, porque supongo que son lo único que sobrevive con esas temperaturas, siempre aprovechando el Sol.
Las formas de los icebergs son de lo más variada, las tonalidades del azul intenso al blanco, a veces brillantes por el agua que se derrite y a veces agujereados, son muy diferentes en aspecto. Cerca de los glaciares es impresionante ver esos gigantes acantilados de hielo a punto de desquebrajarse y "liarla parda". El sonido de la rotura se extiende por el suelo debido a las vibraciones que se produce en el momento de la rotura y te sube por los pies.
Todo un espectáculo que sólo se puede entender si se ve en vivo. El viaje resulta caro, sobre todo con expediciones especializadas, por eso tuvimos mucha suerte que se fletara este crucero de "prueba" que me resultó mucho más económico, aunque viendo que llenaron el barco sólo a la mitad no creo que lo repitan el año que viene, aunque la experiencia es inolvidable.
miércoles, 11 de agosto de 2010
Reikiavik
Sólo nombro la ciudad porque estuve en Islandia nada más que dos días, y prácticamente solo tuve la suerte de ver la capital y el lago azul. La isla es de increíbles paisajes, volcánica y húmeda, tierra negra y verdes vivos. Unos contrastes increíbles que se intensifican con las diferentes fumarolas, géiseres y largas puestas de Sol, gracias a sus 18 horas de sol en verano y una noche que nunca acaba de ser del todo oscura.
La capital es sencilla y moderna, sin grandes alardes, de gente amable y sorprendentemente cosmopolita a pesar de su distancia y la población de la ciudad (aproximadamente como la de Albacete), puedes encontrar grandes murales artísticos por las calles del centro, tiene gran cantidad de librerías, bibliotecas, galerías y cafés. Una gran calle central (Laugavegur) donde se aglutinan la gran mayoría de tiendas para turistas y ropa, que lleva desde el mar hasta la catedral más peculiar de la ciudad, que personalmente me recuerda a un transbordador shuttle de la NASA. Las calles son de nombres interminables y los conductores son los más respetuosos que he visto en mi vida.
La electricidad es muy barata gracias a la geotermia de la isla, y los gatos buscan el calor de las alcantarillas a través de sus agujerillos. La gastronomía islandesa no es su fuerte, ya que se basa prácticamente en el pescado ahumado y conservas, por ello tienen gran cantidad de restaurantes internacionales (incluido uno de tapas).
El aeropuerto de Keflavik lo primero que nos enseña es un cartel con la longitud y latitud de donde nos encontramos (64°N). Tiene dos extrañas monumentos/esculturas a su salida, una que nos recuerda a un arcoíris, y otra que es como un huevo gigante de plata del que sale una especie de aleta que se supone que es el ala de un avión que acaba de nacer... ni más ni menos.
El lago azul (blue lagoon), para empezar, es artificial, es decir, que el agua proviene de una central geotérmica colindante al lago, supongo que habrá lagos naturales por lo que se ve en el vídeo que os 'posteo' justo después de este párrafo, pero... al que nos llevan los turistas es a ese. Está todo muy bien estudiado, te dan una muñequera supermoderna para el baño que te da acceso a una taquilla y a entrar y salir del centro, tiene duchas muy bien cuidadas, y además del pertinente minilago tiene saunas, baños turcos, cafetería, solarium y por supuesto una tienda de regalos.
Personalmente me resultó mucho más gratificante los 10 minutos andando por el paisaje exterior. Se trataba de roca reciente, se notaba que podías ser el primero en pisar algunas de esas rocas al sentir como se quebraban a tu paso, encima tenía un verde manto de un musgo que a veces llegaba a ser de más de medio metro de grosor, dando la impresión de que andurreabas por un colchón natural gigante. La roca prácticamente la podías arrancar con la mano y era de diferentes formas y colores, y toda ella 'burbujeada' por su reciente formación.
Y no, no vi ninguna referencia a Björk.
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