Buenas noches, os escribo a las tantas de la madrugada, esperando que escribir unas líneas me induzcan el sueño que, la cafeína, el azúcar, el jetlag y, creo que, correr después de mucho tiempo me han robado.
Debería levantarme temprano, pero dormir no puedo. Así que aprovecho este tiempo para pediros disculpas, si es que alguien me lee de vez en cuando, por no hacerle mucho caso a este blog. Y es que aún sigo siendo un activo lector de bitácoras, y resulta difícil encontrar muchas de ellas que sean activas y lo sigan siendo después de los años. Creo que es muy triste ver un blog totalmente abandonado, donde su última entrada fue de hace ya años, es casi preferible verlo en estado vegetativo que enterrado, pensando que algún día podría volver a tener la actividad de antes. Supongo que el continuo cambio de domicilio que mi trabajo me obliga a realizar cada año (bueno eso hasta ahora... que ya veremos si no tengo que emigrar como media España), el tiempo que cada vez más me exige mi trabajo, la procrastinación, y la cada vez mayor atención que necesito prestar a mi vida personal y otras aficiones hacen que deje este blog de lado, pero ya sabréis que para que una afición sea realmente divertida, no debe hacerse a desgana. Debe hacerse como lo estoy haciéndolo ahora, entreteniéndome y enriqueciéndome.
Esto es una imagen para darle dramatismo a la entrada, ya veis... el significado es fácil de coger.
Siento estar atrapado en mi vida adulta, y tal. Pero prometo darle más vidilla a este blog una vez me asiente, o cuando me vuelva a entrar el gusanillo de escribir tonterías que a nadie le importan. Me vuelvo a la cama, a ver si me puedo dormir.